La impresión y distribución bajo demanda supone una nueva relación entre el lector y los libros. Las nuevas tecnologías, incluyendo internet, hacen que la implementación de este modelo ofrezca ventajas claras, no solo sobre la cadena de valor, sino también sobre la oferta de libros y la bibliodiversidad.
Las ventajas del modelo POD
1. Ahorro en costes de almacenamiento:
Una de las ventajas más evidentes es no tener que almacenar libros en stock. Los libros no necesitan estar físicamente para poder ser vendidos, por lo que al ahorro de los costes de almacenamiento hay que sumarle los de manipulación y contabilidad del inventario.
2. Reducción de la inversión inicial:
La impresión bajo demanda libera a los editores de realizar grandes inversiones iniciales en stocks, permitiéndoles ajustar la producción a la demanda real del mercado.
3. Monetización del catálogo al completo:
Elegir este modelo de impresión y distribución genera un impulso positivo para las editoriales que tienen un buen fondo editorial pero que no llegan al mercado tan fácilmente. Aunque cuenten con lectores fieles, lo son en un número reducido y mantener este tipo de fondos editoriales es costoso si se recurre a impresiones de larga tirada.
4. Eliminación de los libros agotados:
Cuando hablamos de libros agotados, lo hacemos realmente de lectores «decepcionados» que solo tienen la opción de buscarlos en librerías de segunda mano, físicas u online.
5. Disponibilidad internacional:
El libro impreso parte de un archivo digital, generalmente en PDF, que no conoce fronteras ni entiende de aduanas. En un entorno seguro, como el que ofrece Bibliomanager, tiene la posibilidad de ser impreso en el país donde se realiza la venta, sin exportaciones ni devoluciones.
6. Control de las ventas y trazabilidad en tiempo real:
Este modelo nos permite también conocer en tiempo real en qué fase del proceso de producción está el libro, pero además en qué librerías se está vendiendo. Esta transparencia permite al editor tomar decisiones en cuanto a campañas específicas de promoción y centrarse en la generación de una comunidad lectora.
7. Sostenibilidad económica y medioambiental:
El coste de impresión de libros se ve impulsado por pronósticos inexactos y por procesos de fabricación ineficientes, lo cual conduce al almacenamiento de ejemplares y a su posterior destrucción.
Las empresas del papel se están transformando, buscando modelos propios de la bioindustria y en camino de ser partícipes importantes de la bioeconomía. Mientras tanto, toda producción que base su modelo en las necesidades reales y no en supuestos o en predicciones inciertas ayudará a una producción y a un consumo más responsable y sostenibles, por lo que la impresión bajo demanda puede desempeñar un papel importante en la búsqueda de modelos sostenibles.
8. Ediciones de nicho y apuesta por autores noveles:
Es un modelo muy adecuado también cuando se desean imprimir o reimprimir los llamados libros de nicho, que pueden tener un precio alto y expectativas de ventas limitadas.
Es el caso de las obras cuya demanda es minoritaria, pueden ser de gran valor para bibliotecas, museos y archivos, pero su capacidad de comercialización fuera de ese ámbito es muy escasa.
Toda editorial que publique obras de ficción y que no dedique su catálogo a autores clásicos aspira a descubrir un nuevo talento del que sentirse orgullosa y que le garantice ventas. Sin embargo, es posible que los lectores no piensen lo mismo, pero la impresión y distribución bajo demanda posibilita que las editoriales puedan dar oportunidades a nuevos autores con menores riesgos de inversión.
De hecho, el creciente interés en este modelo se debe, en parte, a que ayuda a los editores a producir los libros más rápido, y también les permite apostar por autores y títulos que no podrían considerar si tuvieran que producirlos bajo un modelo de grandes tiradas.
9. Revisiones y actualización:
A pesar del trabajo que hacen los correctores, a veces se pueda detectar alguna errata una vez impreso el libro. Sin embargo, gracias a la impresión bajo demanda se puede actuar de inmediato, de manera que el siguiente ejemplar vea la luz con las debidas correcciones.
Además, si el autor o el editor deciden hacer alguna modificación, actualización o revisión, añadir un nuevo capítulo, prólogo o epílogo, la impresión bajo demanda permite hacerlo enseguida sin los costes que supondría cambiar toda la tirada cuando se imprime en offset.
10. Democratización de la oportunidad de venta:
El acceso a los grandes canales se democratiza para los editores, pero también el acceso a una gran oferta para las pequeñas y medianas librerías.
En definitiva, la impresión y la distribución bajo demanda suponen multitud de ventajas que aportan rentabilidad y eficiencia al mundo de las librerías y al editorial. Unas ventajas que apuntan hacía un mismo objetivo, generar más ventas con menos inversión.
Un mundo, el de la impresión y al distribución internacional bajo demanda, que es mucho más amplio de lo que aquí se expone. Si quieres descubrirlo: